Los problemas oculares pueden comenzar desde muy temprana edad, de ahí que es necesario revisar a los niños desde muy pequeños.
A partir de los 3 años de edad es obligatorio realizar una primera revisión oftalmológica, para descartar defectos de refracción tales como la miopía, hipermetropía y astigmatismo, que se pueden corregir mediante corrección óptica de gafas.
Existen patologías como cataratas congénitas, glaucoma congénito o retinopatía del prematuro que se presentan en el nacimiento y habitualmente el pediatra deriva al recién nacido al oftalmólogo.
Otra enfermedad ocular muy frecuentes es el estrabismo, el cual se suele presentar en los primeros meses o años de vida, es muy importante acudir al oftalmólogo cuanto antes, pues es una de las principales causas de ambliopía u ojo vago.
Las revisiones tempranas permiten detectar el conocido como “ojo vago”, enfermedad ocular muy común y que tiene fácil diagnóstico y tratamiento, aunque por encima de los 9-10 años de edad poco podemos hacer, pues se alcanza la madurez cerebral oftalmológicamente hablando.
Es muy importante realizar un seguimiento del niño miope, pues existen tratamientos con gotas (atropina en bajas concentraciones) y de lentes ortoK que permiten ralentizar el crecimiento de la miopía y por lo tanto disminuir todas las complicaciones asociadas a la miopía magna ( desprendimiento de retina, glaucoma, cataratas en edades tempranas, etc…).
En definitiva es fundamental el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades oculares en los niños para prevenir problemas cuando sean adultos.
La ambliopía u ojo vago se produce cuando, sin existir ninguna alteración en las estructuras del ojo, se manifiesta una disminución de la agudeza visual. Generalmente se produce en un solo ojo, aunque puede afectar a los dos y suele venir provocada por la falta de la estimulación visual adecuada durante el periodo crítico de desarrollo visual lo que afecta a todos los mecanismos neuronales encargados de la visión.
El ojo vago es la causa más frecuente de pérdida de visión entre los niños y jóvenes de los países desarrollados, y afecta aproximadamente al 3% de la población.
Las principales causas que provocan el ojo vago son el estrabismo y la anisometropía o grandes diferencias de graduación entre un ojo y otro.
TRATAMIENTO
El ojo vago se trata mediante gafas y oclusiones del ojo dominante (parches o gafas especiales de oclusión temporal) para forzar así la actividad del ojo afectado
En el tratamiento del ojo vago hay que tener en cuenta que, si no se aplica en el momento adecuado del desarrollo del paciente, durante la llamada época de plasticidad cerebral (hasta los 9-10 años aproximadamente), la pérdida de visión será permanente e irreversible.